Hoy hablamos con el Dr. Alfonso C. Gálvez Martín de la Unidad de Obesidad de la Clínica Beyou de Granada para tratar la importancia de realizar dieta y ejercicio físico para reducir peso.
Y es que se ha demostrado científicamente que realizar actividad física de baja o moderada intensidad, consume una mayor proporción de grasas y es la mejor opción para regular el peso y la composición corporal aumentando ligeramente la masa muscular.
Si el paciente sólo realiza ejercicio, la pérdida de peso será lenta, lo cual no significa que las personas que quieran controlar su peso deban dejar de hacer ejercicio, lo que esto implica es que la sola reducción del aporte calórico puede producir una pérdida de peso corporal mucho mayor que el ejercicio, pero será mucho más efectivo si combinamos los dos, dieta y ejercicio.
También se ha demostrado que, tras el ejercicio, el metabolismo de las grasas aumenta, por lo que el cuerpo tiende a quemar más calorías en estado de reposo. Por este motivo, nunca se debe tomar en cuenta el peso tras la realización de la actividad.
Y aunque la mayoría de los pacientes acuden a nuestras consultas para lograr perder peso, es importante hacerles ver que no sólo es el mejor medio para hacerlo, sino que implica una mejora de la salud a nivel de autoestima y motivación.
¿Qué tipo de actividad física es aconsejada para la pérdida de peso?
Se llama ejercicio aeróbico a aquel para cuya realización se exige una demanda de oxígeno continua al cuerpo, de modo que el músculo utiliza como combustible principalmente nuestras reservas de grasa.
Los ejercicios aeróbicos, son aquellos ejercicios dinámicos en los que implican a grandes grupos musculares con un largo período de trabajo y a una intensidad moderada. No existe un ejercicio perfecto para prescribirlo a la generalidad de la población, sino que para realizar esta tarea es preciso hacer una elección en base a las preferencias personales y a la disponibilidad de medios. Algunos ejemplos son: caminar, andar a paso ligero, aerobic, bicicleta, el esquí de fondo, natación, bailar.
¿Con qué frecuencia se debe realizar la actividad física?
Las líneas generales para el ejercicio aeróbico, son las de trabajar con una frecuencia de 3 a 5 días por semana, durante 15 a 60 minutos por sesión, a una intensidad de trabajo adecuada a las capacidades individuales. También es comúnmente aceptado los 150 minutos por semana o los 30 minutos por día.
En la progresión del programa, debe tenerse en cuenta que antes de aumentar la intensidad del ejercicio, debe incrementarse la duración, la cual, es conveniente que en la etapa de iniciación no exceda los 12-15 minutos por sesión.
¿Con qué intensidad se debe realizar la actividad física?
La intensidad del ejercicio aeróbico se suele medir en relación con el volumen de oxígeno máximo consumido por el cuerpo, como esta medida es difícil de establecer, es mucho más común medir tal intensidad a partir del número de pulsaciones cardíacas por minuto.
En general, se admite que el número máximo de pulsaciones por minuto que soporta un corazón sano es del orden de “220 – edad”. Consideraremos un ejercicio aeróbico suave a moderado al realizado con una media de entre el 60%-75% de la frecuencia cardíaca máxima. Todo ejercicio que suponga un número de pulsaciones por encima del 85% no quema grasas, sino las reservas de hidratos de carbono que son muy limitadas, y es considerado como ejercicio anaeróbico.
Para que la prescripción del ejercicio sea adecuada, es aconsejable hacerse previamente una evaluación médica que aporte datos sobre situaciones que pudieran suponer un riesgo durante la práctica del ejercicio. Para ello le brindamos a un completo equipo médico en las Clínicas Beyou Medical Group que le atenderá de forma personalizada y le aconsejará sobre los mejores tratamientos para su caso.