Dicen que la política envejece mucho. El nivel de estrés al que se enfrentan día a día muchos políticos, unido al volumen de trabajo que tienen cada jornada supone que, en solo un año, un político envejezca mostrando una apariencia como si originalmente hubieran pasado cinco años.
Buena muestra de ello son las imágenes de la toma de posición del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, y las instantáneas publicadas actualmente apenas unos años después: el envejecimiento, además de la fatiga o cansancio físico, es más que evidente.
Pero no debemos irnos muy lejos para encontrar ejemplos claros en este sentido. El ex-presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero o la ex-vicepresidenta del Gobierno de Zapatero, María Teresa Fernández de la Vega, son un ejemplo claro.
Este sentido, De la Vega ha aparecido recientemente en un acto público con una apariencia estética ciertamente envidiable. Y es que hace algunas semanas se sometió a un lifting muscular con intención de eliminar las arrugas que dejaron en su rostro seis años de gobierno.
Más concretamente, el rostro de De la Vega goza de una mayor luminosidad, menos arrugas tanto alrededor de los labios como en la frente, y un color muchísimo más saludable. Además, se ha procedido a estilizar el cuello, que aparece prácticamente sin arrugas.
Vía | La Vanguardia